Cieza es un municipio de la Región de Murcia (España). Su término municipal tiene una superficie de 365 km2. Su Ayuntamiento, en pleno casco antiguo, se encuentra en una altitud sobre el nivel del mar de 187 m. y tiene unas coordenadas UTM de x=637.688, y=4.233.456. Es capital de la comarca de la Vega Alta del Segura y cabeza de partido judicial. Con sus más de 35.000 habitantes y la conexión directa con Madrid por autovía y ferrocarril, representa la puerta natural de entrada a la Región de Murcia por el Norte.
Rodeada de montañas de mediana altura, como la Sierra de la Cabeza del Asno, la Sierra Larga, la Sierra de Ascoy, el Almorchón, la Sierra del Oro, o, a tan sólo unos pocos cientos de metros del casco urbano, la emblemática Sierra de la Atalaya, Cieza se encuentra en un fértil valle surcado por el río Segura y regado por numerosos canales y acequias. De importante tradición agrícola, Cieza es reconocida internacionalmente por la excelente calidad de sus frutas, destacando entre ellas los melocotones en sus diferentes variedades, que con más de 130 millones de kilos anuales es el municipio europeo con mayor producción de esta riquísima fruta.
Cieza celebra su Feria y Fiestas patronales, en honor a San Bartolomé, durante la última semana del mes de agosto, justo cuando va tocando a su fin la recolección de la fruta en los campos, cuya actividad es un importante motor de la economía ciezana.
No menos importante ha sido en otro tiempo para Cieza su actividad en el ramo de la espartería. Desde finales del siglo XIX y hasta mitad del XX, la industria de transformación del esparto evoluciona en Cieza de tal manera que adquiere importancia mundial. Durante aquellos años, la vida de los ciezanos y su economía giraban en torno al esparto, hasta que llega su declive con la importación de otras fibras. Finalmente, almazaras y molinos harineros completaban la industria ciezana de entonces.
En la actualidad, además de otros potenciales económicos, con una actividad industrial diversificada, cuyos polígonos industriales gozan de excelentes comunicaciones por autovía, Cieza se manifiesta como destino turístico ideal por sus enclaves naturales y por su riqueza paisajística, destacando su Semana Santa, calificada de interés turístico internacional, o la imagen de ensueño que ofrece la floración de los millones de árboles frutales, en el inicio de la primavera.
En cuanto a lugares de cita obligada para el visitante de Cieza, hay que señalar el Museo de Siyâsa, situado en lo que fue el Casino del pueblo; el ‘conjugatorio’, instalado en la Ermita del Santo Patrón, junto al privilegiado por sus vistas Balcón del Muro; el pequeño Museo del Esparto, ubicado en la Calle Pablo Iglesias, 53; la Casa Efe Serrano en la Calle San Sebastián, 20; y, como ‘galería’ permanente aire libre, el Paseo, donde existen en torno a 600 m2 de pinturas, entre el suelo y pilastras, obra del pintor ciezano Pepe Lucas.
Fuera del casco urbano, merece la pena visitar el Molino de Teodoro y caminar por el Paseo Ribereño hasta el Puente de Alambre, contemplando rincones privilegiados de la huerta junto al río Segura.